El riesgo de robo siempre está a la vista: aquí hay algunos consejos sobre dónde esconder las pertenencias, y qué soluciones evitar por completo.
Cualquiera que haya sufrido un robo sabe lo traumática que puede llegar a ser esta experiencia. No sólo hay que vivir con la pérdida de objetos de valor, sino también con la sensación de malestar que supone haber sufrido una auténtica violación del espacio doméstico.
Evitar esconder dinero en casa sería lo ideal: llevar joyas valiosas o dinero en efectivo constituye un alto riesgo de pérdida.
Sin embargo, si desea guardar dinero o joyas en casa, y no tiene la posibilidad de instalar una alarma antirrobo de última generación, puede plantearse recurrir al viejo y tradicional método de los escondites.
Algunos de ellos, sin embargo, se ven y se vuelven a ver, y pueden hacer más daño que otra cosa. He aquí, pues, una lista de sugerencias para mantener su dinero a salvo de robos.
Empecemos por decir que hay algunos escondites muy conocidos que deben evitarse a toda costa: los armarios y los cajones, por ejemplo, son escondites muy comunes, y los testimonios de antiguos delincuentes confirman que son los primeros lugares que hay que revisar. Esconder dinero, o incluso cajas fuertes, detrás de cuadros o dentro de jarrones también puede ser muy inconveniente.
También está el viejo método de los abuelos, el de rasgar el colchón. Se trata de un método anticuado, y por ello no recomendable: dormir directamente sobre nuestros ahorros no garantiza nuestra seguridad, y de hecho constituye un peligro para la misma. Veamos juntos qué escondites menos comunes pueden evaluarse.
Entre las opciones seguras para esconder dinero en casa, hay: