Síntomas y tratamiento de la enfermedad del escaparate: nunca se admitiría padecerla
La enfermedad del escaparate: por qué se llama así y en qué consiste.
Son muchas las enfermedades psicofísicas existentes y sus variantes aún mayores. No es fácil desentrañar los diversos nombres científicos y no científicos que se dan a los trastornos psicológicos y a las enfermedades físicas. En algunos casos, sin embargo, la definición que se da de la enfermedad puede inducir a error a la hora de entender de qué se trata.
Un ejemplo es el caso de la llamada enfermedad del escaparate que, a primera vista, haría pensar en los trastornos de las compras compulsivas o, en todo caso, en todas aquellas patologías ligadas al deseo temerario de aparentar y darse una imagen/máscara externa. En realidad, la definición en este caso alude a algo más. De hecho, se trata de un trastorno físico vascular, que afecta a los miembros inferiores provocando fuertes dolores con punzadas discontinuas.
De ahí la definición de enfermedad de la ventana, ya que sufrir estas punzadas hace que la persona que la padece tenga la sensación de estar continuamente obligada a detenerse porque no puede seguir caminando. Este movimiento de caminar y luego detenerse para esperar a que se calme el dolor es muy similar al comportamiento de alguien que, mientras compra en una tienda, camina, deteniéndose tras unos pasos para mirar los productos del escaparate.
Cómo tratar y prevenir la enfermedad
Los principales síntomas de la enfermedad son, por tanto, la marcha intermitente y los dolores punzantes repentinos pero temporales. La enfermedad de las ventanas se trata farmacológicamente, con la prescripción de fármacos específicos que tienen funciones antiagregantes plaquetarias, es decir, reducen la densidad de la sangre y disminuyen la tendencia de las células sanguíneas a agregarse.
Junto a esto, es bueno hacer un buen trabajo de prevención, para evitar que se produzca la enfermedad en cuestión. Llevar una vida sana ayuda mucho a corregir los factores de riesgo, ya que de todas formas se trata de una enfermedad cardiovascular.
Cómo se realiza el diagnóstico
El diagnóstico de la enfermedad en cuestión se realiza mediante la realización de investigaciones específicas, es decir, mediante la exploración Doppler, Doppler eco-color, que también ayuda a identificar cualquier terapia que deba seguirse, y, por último, con una angiografía por TAC o RMN.
Las personas más propensas a contraer este tipo de enfermedad son los diabéticos, los que padecen arteriosclerosis o hipercolesterolemia. Además, los fumadores son especialmente propensos a esta tendencia. Sería aconsejable que las personas que padecen estas enfermedades se sometieran a revisiones periódicas, para estar más seguros.