Investigaciones recientes han confirmado que el uso de tabletas y teléfonos móviles antes de los 12 años influye negativamente en el rendimiento escolar.
El uso prolongado de móviles en los niños es un obstáculo para su aprendizaje. Al contrario, según una investigación realizada por Milano – Bicocca y Supsi sobre datos invalsi, reduce significativamente su rendimiento escolar.
La investigación realizada por Tiziano Gerosa, investigador de la Universidad de Ciencias Aplicadas y Artes de la Suiza Meridional (SUPSI), y Marco Gui, director del Centro Benessere Digitale di Milano – Bicocca (Departamento de Sociología e Investigación Social), se titula «La adquisición temprana de teléfonos inteligentes repercute negativamente en la competencia lingüística, pero sólo en los grandes usuarios de medios de comunicación. Results from a longitudinal, quasi-experimental study». En el transcurso del estudio, los investigadores pusieron a prueba las principales hipótesis teóricas sobre el papel del móvil inteligente en los procesos de aprendizaje, analizando tanto las repercusiones negativas como los posibles beneficios.
En la investigación participaron más de 1.500 estudiantes de entre 10 y 14 años, comparando el rendimiento académico de los que habían recibido un teléfono móvil antes de los 12 años (a los 10 y 11 años), es decir, en la fase de transición entre primaria y secundaria, con el rendimiento académico de los que lo habían recibido en los años siguientes, es decir, 12, 13 y 14 años. Esto es lo que resultó.
Según los datos recogidos por los investigadores, el uso temprano e intensivo de los móviles no mostraría ningún beneficio en los estudiantes al final de la secundaria, ni siquiera en los niños más motivados para estudiar. Además, aquellos que afirmaron haber estado mucho tiempo delante de la pantalla de una tableta u otro dispositivo antes de poseer un móvil (el 23,5% de la muestra), mostrarían un impacto negativo significativo en el aprendizaje del español.
Este resultado confirma una hipótesis que está surgiendo en la literatura internacional», afirma Marco Gui, «según la cual el uso autónomo de los «medios móviles» durante la infancia puede ser especialmente perjudicial para las personas con fragilidades preexistentes, en este caso una capacidad reducida para limitar el uso de pantallas vinculada al contexto familiar o a características psicológicas específicas».
El impacto del uso de los medios digitales en el crecimiento de los niños es un tema debatido desde hace tiempo, y aunque la bibliografía hace tiempo que identificó la relación negativa entre el uso intensivo y precoz de los móviles y el rendimiento escolar, siguen faltando pruebas científicas más sólidas que las simples correlaciones. «Este estudio», afirma Tiziano Gerosa, «es el primero en Italia que investiga el impacto de los smartphones en los niveles de aprendizaje utilizando metodologías más sofisticadas».