Para los pagos con POS, la revolución está cerca, pronto será posible pagar con un anillo, he aquí cómo.
La tecnología cambia constantemente, mantenerse informados no es nada fácil, sinceramente es bastante complejo, sobre todo para quienes no están especialmente acostumbrados a estos cambios.
Los gigantes de la tecnología trabajan sin cesar, día y noche, para ofrecer soluciones válidas y eficaces a todos los consumidores. Esto puede verse en el mercado de los smartphones y en el de los ordenadores personales.
Hace sólo unos días era el flamante iPhone, uno de los dispositivos tecnológicamente más avanzados y, sin duda, también más populares entre los consumidores. Un dispositivo que realmente parece estar por encima de la media, a pesar de no ser inmune a las críticas.
Pero la tecnología abarca nuestra vida cotidiana en 360 grados, tocando cada pequeño aspecto de nuestras vidas, desde el menor hasta el más importante. Esto incluye también las tecnologías para pagos telemáticos. Dejando a un lado el dinero en efectivo, cada vez más consumidores optan exclusivamente por los pagos electrónicos, pero incluso aquí, algo está a punto de cambiar.
En los últimos años, especialmente desde la pandemia, los pagos con POS han experimentado un aumento espectacular. Es un método de pago sencillo, extremadamente práctico y cotidiano. Para pagar, basta con llevar la tarjeta encima.
Al menos estas eran las reglas hasta no hace mucho. Hoy en día, la tecnología no deja de llegar, y después de haber pagado con el móvil y el reloj, ha llegado el momento de plantearse un método de pago completamente nuevo, y he aquí de qué se trata.
Uno de los gigantes de la tecnología ha lanzado su anillo Galaxy. Hablamos de Samsung con su anillo que debería llegar al mercado español ya en el primer trimestre del próximo año. Un dispositivo capaz de monitorizar el estado de salud de quien lo lleva y de proceder con una serie de funciones ultratecnológicas.
No, no tendrá pantalla, pero parece que gracias a una aplicación dedicada, debería ser posible pagar con sólo acercar el anillo al pos. Muy sencillo y rápido, tal y como debería ser la tecnología. ¿Y los precios? Aún no lo sabemos.