Hace milenios el ser humano corrió el riesgo de extinguirse, fue una auténtica «lucha por la supervivencia». El descubrimiento de nuevas pruebas científicas.
Hoy en día, fuerte con «sus» 8.000 millones, el hombre parece invencible. Sin embargo, hace muchos siglos, el hombre corrió el riesgo de extinguirse; era la época de la Edad de Hielo y el hombre estuvo a punto de desaparecer de la faz de la tierra.
Según un estudio reciente, ha habido al menos cinco ocasiones a lo largo de la historia en las que la raza humana ha corrido el riesgo de extinguirse; quizá una de las más graves fue cuando la erupción de un supervolcán hace 70.000 años amenazó con hacernos acabar como los dinosaurios.
Pero, ¿qué ocurrió concretamente? Hace aproximadamente 1, 2 millones de años, los investigadores calcularon que entre nuestros primos lejanos Homo erectus y Homo ergaster, toda la raza humana sumaba quizá 26 mil personas, no más. Peor aún, sólo había 18 mil jóvenes; menos que los gorilas actuales de la Tierra.
No está claro por qué había tan pocos humanos en el continente en aquella época; sin embargo, parece tener algo que ver con la Edad de Hielo que empujó a los humanos de la época más allá de los límites que podían soportar. En aquella época, nuestros antepasados no disponían de las herramientas y la ropa para protegerse que conocemos hoy.
Además, hace entre 800.000 y 900.000 años, los seres humanos corrieron el riesgo de desaparecer durante otro periodo de enfriamiento gradual de la Tierra; según este reciente estudio, los humanos en la Tierra se redujeron a sólo 1.280 individuos.
El declive parece estar relacionado con un cambio climático que desencadenó largos periodos de glaciación, un descenso de la temperatura del mar y periodos de sequía prolongada en África, exterminando así especies vivas enteras de la época. Para entonces, la raza humana había evolucionado en Neandertales y denisovanos, nuestros antepasados cercanos en el primer caso, una raza extinguida en el segundo. Y también los Neandertales corrieron idéntico destino, del que escaparon por unos pocos puñados.
Según el profesor Giorgio Manzi, de la Universidad Sapienza de Roma, «para una población de ese tamaño, basta un fenómeno meteorológico adverso, una epidemia, una erupción volcánica y desaparece de la faz de la Tierra». Un destino adverso al que hemos sobrevivido sólo por pura casualidad, por una tirada de dados del destino.