Samsung atraviesa dificultades considerables, el gigante de la electrónica tiene los pies de barro. Averigüemos por qué.
¿Samsung o Apple? ¿Smartphone o iPhone? Preguntas que atenazan a todos los entusiastas de la tecnología. Por supuesto, hay quien prefiere marcas menos conocidas o quien pone toda la carne en el asador de los enormes smartphones chinos. menos blasonados, pero igual de potentes. Sin embargo, entre los aficionados a la tecnología, el enfrentamiento siempre parece estar entre estos dos – formidables – contendientes.
Malas noticias en camino para los fans de Samsung. El gigante de la electrónica, especialmente de los smartphones, atraviesa un periodo muy adverso, incluso negativo. La competencia con Apple es dura, ardua, difícil. El iPhone domina, no parece haber comparación real. Galaxy S y Galaxy Z ganan en todos los frentes, arrollan al acorazado Samsung. Y pronto Apple anotará otro punto ganador, se lanzará el nuevo rangem, debilitando considerablemente al competidor.
Las cifras no parecen mentir a este respecto: Samsung querría bajar a 220 millones de unidades, frente a los 225 millones de Apple. Cupertino se colocaría así en el podio, sin temer más rivales.
«Este ranking de envíos tendría un impacto positivo a largo plazo en el ecosistema Apple», afirma Ming-Chi Kuo, analista surcoreano de Apple.
Por tanto, Samsung querría pasar desapercibida, limitar el despilfarro: mejor limitar los envíos, mantener bajos los volúmenes de producción para 2024. Apple, por su parte, ya se frota las manos, preparándose para un aumento de entre el 5% y el 10%.
En realidad, a Apple tampoco le va muy bien; ha habido varios problemas de producción, y el conocido iPhone 15 se ha reducido a sólo 80 millones de unidades debido a problemas con la línea de producción. El propio iPhone 15 Pro Max corre el riesgo de llegar tarde, lo que retrasaría la producción.
Mientras tanto, Apple ha aumentado la producción de sus modelos más antiguos y sigue vendiendo más que nunca: las variantes iPhone 14, Plus, Pro y Pro max. Las ventas tienen muy buena pinta, hecho confirmado por las predicciones de repunte bursátil. La bolsa ve con buenos ojos a Apple; mucho menos a Samsung.
Los fans de Samsung, por su parte, la acusan de perseguir en vano a Apple, imitando sus modelos y políticas; ciertamente, ambas empresas producen smartphones que pierden valor muy rápidamente, persiguiendo las fugaces tendencias del mercado. Las dos empresas, en muchos aspectos, son curiosamente similares.