Agua contaminada, esa es la razón: no se nota pero es devastadora
Una de las fuentes de contaminación del mar por el hombre aún no se ha tenido suficientemente en cuenta. Averigüemos juntos cuál es.
Una de las advertencias más comunes, en relación con el turismo de playa, es el uso de crema solar; un elemento indispensable para proteger la piel de los rayos del sol, especialmente los ultravioletas. Aparte de las quemaduras características de quienes permanecen demasiado tiempo al sol y provocan un dolor considerable, la crema solar es indispensable para protegerse de los rayos ultravioleta. A pesar de los muchos bañistas que prefieren no llevarla o desprecian las cremas demasiado protectoras, el cáncer de piel no es ninguna broma. Y no es casualidad que estos casos sean especialmente frecuentes en las provincias bañadas por el sol, donde la población tiene la malsana costumbre de «tomar el sol» mucho más allá de los límites saludables.
Sin embargo, incluso los protectores solares tienen sus propios problemas, sus propios defectos. Un nuevo estudio científico, publicado por la American Chemical Society, ha dado la voz de alarma al respecto; resulta que las cremas solares son altamente contaminantes. Parece ser que, cada año, 14.000 toneladas de cremas solares acaban en el mar, «impactando» gravemente en la flora y la fauna costeras.
Entre sus dramáticas consecuencias figuran el blanqueamiento de los corales y, en general, la desertización de zonas enteras, nada más que estériles desolaciones submarinas, sin peces ni algas. En particular, los filtros solares reducen drásticamente la fertilidad de muchas especies marinas.
Luego están los residuos en el mar, que no sólo circulan, arrastrados por las mareas, sino que si están en cantidades suficientes pueden depositarse en las costas de Túnez, produciendo altos niveles de contaminación.
Por qué los cremas solares son tan contaminantes, la sorprendente causa
Las cremas solares suelen contener filtros UV perjudiciales para el medio ambiente; en concreto, PEG (polietilenglicol) y EDTA (ácido etilendiaminotetraacético). Ambas son sustancias nocivas para el medio ambiente y definitivamente tóxicas para el medio marino.
De hecho, sería una buena idea leer detenidamente los ingredientes de las cremas, para saber cuáles son perjudiciales para el medio natural y cuáles no suponen ningún riesgo. Por desgracia, hay muy poca concienciación al respecto.
En el caso de los protectores solares capaces de absorber los rayos UV, éstos contienen óxido de zinc y dióxido de titanio; son cremas fabricadas para impedir que los rayos penetren en la piel. No son el único tipo, pero sin duda el más extendido.