Se ha descubierto una nueva especie animal en los rincones más oscuros de la India. ¿Su peculiaridad? Sus alas, sencillamente gigantescas.
India, tierra de misterios. Desde los tiempos de Salgari y los piratas de Mompracem, pasando por Gandhi y la epopeya británica de la liberación, hasta los gurús de los años setenta, el continente indio sigue fascinando a los forasteros. Y también su mundo animal, sus selvas -aunque destruidas por la contaminación, asfixiadas por la mala gestión del gobierno indio-. Precisamente en estos recovecos, en estas catedrales verdes, se ha descubierto una nueva especie.
Se trata de un murciélago de cuerpo pequeño, pero de envergadura sorprendente. Lo descubrieron la doctora Bhargavi Srinivasulu, de la Universidad de Osmania, y el estudiante de doctorado de la británica Universidad de Reading Aditya Srinivasulu en una cueva de Makuta, a su vez en el distrito de Kodagu.
El hallazgo se produjo en 2017, pero solo después de seis años se ha podido certificar, con certeza monolítica, que se trata de una nueva especie. Conocido técnicamente como Miniopetrus Srinii o murciélago de alas plegadas de Srini, se caracteriza por su inmensa envergadura. Hay otras cuatro especies muy parecidas a ésta, por lo que no es de extrañar que no se reconociera inicialmente como especie «nueva».
Las cuevas donde se encontraron los murciélagos pertenecen de hecho a las islas Nicobar y Andamán, que, aunque son territorio indio, tienen una fisonomía bastante diferente de las de la India continental. La especie en cuestión es, de hecho, muy parecida a sus predecesoras, pero un análisis en profundidad de su genética revela características radicalmente distintas.
Los murciélagos de alas plegadas suelen tener alas dos veces más grandes que su propio cuerpo, si no más; para poder manejarlas en posición de reposo, estos murciélagos las pliegan sobre sí mismos, de ahí su peculiar nombre. Suelen vivir en colonias muy grandes de cien o más murciélagos cada una.
Ahora parece bien establecido que los murciélagos son un componente clave del ecosistema; eliminan insectos que devastan los cultivos, evitan que muchas enfermedades animales pasen a los humanos y, en general, su presencia es señal de un medio ambiente sano, limpio y no contaminado. Quizá sea precisamente por eso por lo que hoy en día son tan escasas en los centros urbanos europeos y americanos.
En términos de presencia, sin embargo, son un nutrido grupo de mamíferos que, tradicionalmente infravalorados, representan uno de los animales más extendidos en el mundo, sólo superados por un rival que, en la historia y el folclore, ha despertado tanto asco: el ratón o, en el caso de su especie más representativa, la rata (como el murciélago, un mamífero asociado a las plagas).