Tragar chicle ocasionalmente no es problema, pero hacerlo con frecuencia o en grandes cantidades puede tener algunos riesgos.
¿Sabías que mascar chicle es una de las costumbres más populares en las sociedades occidentales? ¡Es cierto! Casi todos hemos masticado chicle al menos una vez en la vida. Pero ¿sabías que esta práctica también puede tener algunos beneficios interesantes para el cerebro?
Según algunos estudios, mascar chicle puede ayudar a mejorar la concentración y el rendimiento intelectual. Esto se debe a que la acción de masticar estimula la circulación sanguínea y aumenta la actividad cerebral.
Es difícil encontrar a alguien que nunca haya mascado chicle, pero también es raro encontrar a alguien que no haya tragado accidentalmente un chicle alguna vez en su vida. De hecho, hay personas, especialmente niños, que tienen la curiosa costumbre de tragarse la goma de mascar después de haberle sacado todo el sabor.
Aunque tragar chicle por accidente no es un gran problema, algunos pueden preocuparse por si se queda en el estómago durante, como se ha rumoreado alguna vez y nos hacían creer de pequeños.
Es cierto que el chicle no fue creado para ser digerido, por lo que surge la pregunta, ¿qué ocurre cuando nos tragamos un chicle a diario, ya sea por accidente o de manera intencional?
Un riesgo potencial de tragar chicle es que puede contener edulcorantes artificiales, como el xilitol, que puede crear un efecto laxante en grandes cantidades. Cuando tragas un chicle, tu estómago no podrá digerirlo completamente. En su mayoría, el chicle pasará a través del sistema digestivo sin ser absorbido, y finalmente será eliminado en las heces.
Aunque el chicle puede parecer inocuo para la salud, su consumo excesivo puede llevar a ciertos riesgos. Si se tragan gomas de mascar todos los días, es probable que se forme un bezoar, una acumulación no digerida de sustancias que pueden tener un tamaño variable y localizarse en los intestinos o en el estómago.
Por lo tanto, es importante consumir chicle con moderación y no tragarlo de manera regular. Además, es importante elegir opciones saludables de chicle y asegurarse de desecharlo correctamente después de su uso. En caso de que se presenten síntomas de obstrucción intestinal o molestias gastrointestinales, es importante buscar atención médica de inmediato.