Móvil encendido y cáncer, llega la respuesta: por desgracia es cierto
En la última década, el mundo de los teléfonos inteligentes ha crecido a escala mundial, y ha seguido extendiéndose llegando prácticamente a casi todo el planeta, hasta a los lugares más recónditos. Hoy en día, el mercado mundial ofrece cientos (y hasta miles) de modelos diferentes, que cumplen con las necesidades y requisitos de cada usuario, desde los más exigentes hasta los que buscan una buena relación calidad-precio y se conforman con menos.
Pensar en salir hoy sin el móvil se considera prácticamente una locura, ya que nos ayuda con tantas funciones y actividades cotidianas, gracias a su perfecta integración con todas sus numerosas aplicaciones, como Google Maps y muchas otras similares.
Sin embargo, debemos tener en cuenta también la otra cara de la moneda y no solo los aspectos positivos: en algunos casos, el teléfono móvil podría resultar perjudicial para nuestra salud. Veamos juntos las razones de este daño y, sobre todo, cómo evitarlo de forma inteligente y eficaz.
Tras 20 años de continuos estudios sobre el tema, científicos y expertos han llegado a la conclusión de que los campos electromagnéticos podrían ser potencialmente cancerígenos para el cuerpo humano. Por tanto, dormir con un teléfono móvil cerca podría tener consecuencias, como provocar un cáncer en el futuro. Aunque por el momento todavía no hay pruebas claras de esta teoría, hay que ser bastante precavido.
Ha sido la Organización Mundial de la Salud (OMS), a través de su Agencia Internacional, la que se ha pronunciado y lo ha calificado de peligro potencial. Por otro lado, un juez laboral de Florencia es de la misma opinión, quien habría condenado a Inail, obligándola a pagar una pensión por enfermedad profesional a un vendedor de teléfonos.
La reconstrucción de los hechos
A este empleado se le diagnosticó un tumor (afortunadamente benigno, en este caso) en el oído, por lo que se habría demostrado una relación causa-efecto entre el uso del móvil y la aparición del cáncer.
En el caso citado antes, los científicos habrían instado a las autoridades a investigar más a fondo y evaluar con mayor precisión todos los riesgos relacionados con el uso de teléfonos inteligentes, sobre los que actualmente se presta poca atención.
Por tanto, no queda más que esperar nuevos estudios sobre el tema, que seguramente llegarán en los próximos meses o años, para demostrar con datos concretos esta relación real de causa y efecto entre el uso del móvil y la aparición del cáncer, debatida extensamente desde hace ya varios años.