Pellets para calentarse: Por esta razón vuelven a estar entre las primeras opciones en 2023
Gracias a la rebaja de los pellets, su precio también bajará, por lo que la famosa biomasa leñosa volverá a tener un precio competitivo frente a otros combustibles.
El coste de la energía necesaria para producir pellets volviendo a niveles normales, sin duda lo convierten en una de las opciones más ventajosas para calentar la vivienda, aunque en realidad, las ventajas de los pellets no se limitan a su conveniencia.
Por algunas razones que veremos a continuación, los pellets ciertamente son uno de los mejores combustibles de todos si se evalúan los pros y contras.
Los pellets siguen siendo convenientes: estas son las razones
Entre las principales razones para considerar los pellets como uno de los mejores combustibles podemos enumerar su respeto por el medio ambiente y su eficiencia energética.
En primer lugar, las estufas de pellets permiten utilizar un combustible que, para ser producido, en sí mismo no necesita el talar nuevos árboles.
De hecho, la conocida biomasa leñosa se produce prensando los desechos de la transformación de la madera, por lo que la producción de pellets es totalmente respetuosa con el medio ambiente y tiene un impacto cero en la deforestación.
Otra característica interesante de este producto es su increíble eficiencia desde el punto de vista energético y no solo que sea menos contaminante que la madera normal. Veamos por qué.
Los pellets queman mejor
A diferencia de los troncos normales de madera, los pellets se queman de forma más eficiente.
¿A qué se debe esta mayor eficiencia energética? A que la biomasa leñosa del pellet casi no tiene humedad, garantizando que se queme completamente una vez colocado en la estufa.
Asimismo, los pellets se queman completamente, por lo que no dejan muchos residuos a diferencia de la madera tradicional, lo que también beneficia a la chimenea y a los gases de combustión en general. De hecho, requieren limpiarlas con menos frecuencia que con una chimenea tradicional, precisamente porque los pellets se queman casi por completo.
Por ejemplo, si comparamos un tronco de madera curado durante incluso más de 18 meses, se notará cómo los pellets se queman casi al 100%, mientras que la madera curada convertirá al menos el 10% de su masa en residuos que deben limpiarse.
Los pellets producen más calor
Si consideramos la producción de calor de la estufa para calentar la habitación, los pellets tienen la capacidad de calentar el doble de metros cuadrados de la habitación con la misma masa quemada que los troncos de madera tradicionales.
Finalmente, su practicidad la hace apta para todo el mundo, incluso para aquellos que no pueden realizar grandes esfuerzos físicos.
Y es bien sabido que tener que colocar la leña en el propio almacén es un acto agotador, incluso si paga a trabajadores para que lo hagan. Y llevarla hasta la chimenea es un trabajo que nadie puede hacer por ti.
Por tanto, almacenar sacos de 15 kg de pellets es más práctico que almacenar diez metros cúbicos de leña en el garaje, lo que lo convierte en un combustible más práctico y apto también para personas que no gozan de una gran fuerza física.