Regular la temperatura de su caldera es un paso fundamental a la hora de ahorrar hasta la mitad en sus facturas.
El 90% de los españoles no sabe todavía la ventaja de regular su caldera. Con el objetivo de obtener una factura más baja, muchas personas aplican sugerencias a veces poco efectivas con el fin de no dejar de calentar bien su hogar.
Pocos españoles saben que, programando la temperatura de su caldera, pueden ahorrar hasta la mitad del consumo sin el riesgo de padecer frio en su hogar.
Aumento del gas: es un problema muy presente este año debido a la crisis y los suministros limitados de parte de la Russia, de ahí que algunos prefieren pasarse a la calefacción de combustible. Lo que es peor algunas empresas se han aprovechado de la situation extorsionando dinero indebido.
El resultado de la situación actual han sido facturas elevadas en diciembre y el pronóstico para los meses futuros no será mejor, por eso es importante saber cómo ahorrar sabiamente el consumo de gas sin verse obligado a sufrir un invierno frío.
Reflexionando en la epoca tan complicada a la que nos enfrentamos, es natural que las familias busquen la manera de ahorrar dinero sin enfermarse del frio en casa. Erróneamente no se piensa en regular la temperatura la caldera, ajuste que si no se efectúa podría dar lugar a un consumo innecesario de gas. Muchas personas ignoran que regular la caldera es posible gracias a una función existente que puede utilizar diariamente sin necesidad de llamar a un técnico.
No solo facturas más económicas: un ajuste correcto también significa un buen funcionamiento de la caldera y, por tanto, prevención para evitar malfuncionamientos en el futuro. Tanto los calefactores eléctricos como las calderas que funcionan con el gas necesitan ser reguladas y la temperatura correcta supone un ahorro del 5% al 10% si no llega a los 20 grados. Si regulamos la temperatura en menos de 20 grados, esto supondrá un ahorro en la factura.
Las válvulas termostáticas y el termostato también son indispensables para obtener un ahorro en la factura: regulando cada valvula individual, de hecho, además de tener más control sobre la temperatura de las habitaciones, ya que unas se usan menos que otras, se puede conseguir un ahorro de entre el 20% y el 30%. Destaca, por ejemplo, el uso del termostato inteligente. De hecho, es capaz de adecuar mejor la temperatura en función de la hora del día, un excelente aliado para optimizar el consumo de forma sencilla.